domingo, 16 de enero de 2011

FRIEDRICH

Hoy iba a deleitaros con una clase-duda de astronomía, pero me prendí en mi amada historia de la pintura, y tengo que cambiar de tema, no lo puedo remediar.

Adoro la pintura del XIX, hay quien ya lo sabe si ha seguido un poco el blog. Y el siglo XIX, si por algo se caracteriza es por la multitud de estilos.
En lugares como Francia o España cuajó la llamada pintura de Historia, más realista, dramática y hermosísima, con enormes formatos. El Prado y el Louvre tienen buena muestra de ellos.

Pero hoy me voy a centrar en un pintor magnífico, alemán, romántico hasta la médula y amante del mundo: Caspar David Friedrich (1774-1840).

Dirías que fue por el mundo en silencio, contemplando, sin levantar la voz, disfrutando de cada rincón y de la inmensidad de la naturaleza, que refleja en sus paisajes y que es la verdadera protagonista de sus pinturas, dejando al ser humano en segundo plano y siempre de espaldas.

Contemplemos el mundo a través de sus ojos, no tiene desperdicio:


Caminante ante un mar de niebla.1818.


El mar de hielo (El naufragio del Esperanza).1823-1824.


La mañana de Pascua.1833.


La luna saliendo a la orilla del mar. 1822.

Hermoso, verdad?

3 comentarios:

  1. En el primer cuadro yo siempre veo a Hölderlin.

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  2. francamente, no sé donde ves el deprimente, hija, qué sensible! estos románticos que eran así, pero más bien arrebatados que deprimentes, no?

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